Lecciones aprendidas de mi viaje a Europa: Talento, Educación y Logística como ventajas competitivas

Recientemente realicé un viaje a Europa junto a los secretarios auxiliares de desarrollo de negocios y asuntos estratégicos del DDEC y el CEO de InvestPR, nuestro principal socio en el desarrollo económico y atracción de inversión. El propósito de este viaje fue tocar base con los altos ejecutivos de compañías europeas de dispositivos médicos en Italia y Alemania que mantienen operaciones en Puerto Rico y entender de primera mano qué retos ven en la isla y cómo podemos atraer expansión de negocios. Además, participamos de la feria más grande de dispositivos médicos en el mundo, en la que además de promover a Puerto Rico, constatamos las tendencias globales en esta industria.
Desde que asumí el rol de Secretario del DDEC, uno de mis principales objetivos ha sido mantener oído en tierra para identificar los retos que a diario enfrenta el sector productivo de la Isla. Es por esto que en mis conversaciones con los 5 CEO’s con quienes me reuní surgieron asuntos relacionados al talento y la logística como algunos de los retos a atender de manera urgente en la Isla.
La buena noticia, es que estos dos temas son medulares en el modelo de competitividad que impulsamos desde el DDEC y que rige las prioridades de nuestros esfuerzos. Sin embargo, me queda más claro que nunca, que ya el tema de impuestos no será el principal atractivo para atraer inversión, especialmente con el tema del impuesto mínimo global que impacta particularmente a estas industrias prioritarias que operan en Puerto Rico. Regreso más convencido que nunca, de que tenemos que obsesionarnos con estos temas que sin dudas nos darán la ventaja competitiva que necesitamos, lo que motivará a estos ejecutivos a seleccionar a Puerto Rico como su destino de inversión.
Cuando hablamos del tema de logística, hemos identificado con estas compañías la necesidad de añadir conectividad aérea a Puerto Rico, especialmente a y desde Europa, que es el destino final de gran parte del producto manufacturado en la Isla y es el origen de mucha de la materia prima de estas mismas compañías. Esto es algo que ya llevamos trabajando unos meses como resultado de la dispensa de transbordo aéreo que nos fue otorgada por el Departamento de Transportación federal. Hemos definido una hoja de ruta, y hemos comenzado a trabajar en ella, para crear las capacidades a nivel local que harán a Puerto Rico un centro de excelencia en logística, en toda la cadena de distribución, desde la transportación terrestre hasta el almacenamiento y monitoreo de la carga, desde su origen a su destino final.
En este tema la Autoridad de Puertos y el Aeropuerto de San Juan están abordo, trabajando una serie de iniciativas para reclamar nuestro puesto como un centro de primer orden en logística. Curiosamente, hay jurisdicciones que reclaman ser los centros de logísticas para manejo de farmacéuticas, como Bruselas y Amsterdam. Irónicamente, estos aeropuertos manejan la carga que produce Puerto Rico, sin embargo, han hecho un gran trabajo de crear las capacidades para ser centros de excelencia en logística y han hecho mejor trabajo comunicándolo.
Como parte de este viaje, mi equipo también visito y se reunió con ejecutivos del Aeropuerto de Amsterdam para ver y entender cómo ellos lograron posicionarse como un centro de logística mundial para farmacéuticas. Con este esfuerzo buscamos añadir la conectividad que ayudará a la base manufacturera local a mejorar sus niveles de servicios y al mismo tiempo servirá de atractivo adicional para atraer nuevas compañías europeas a en la Isla.
En el segundo tema, el de talento, nuestro enfoque ha sido uno de facilitar la colaboración de la industria con el sector educativo, desde la academia hasta las escuelas públicas, para identificar las necesidades de los sectores prioritarios y alinear a la academia para ajustarse a esas necesidades. Comenzamos sentando a todos en la misma mesa y teniendo una conversación sobre las tendencias que están viendo en sus operaciones y en sus competidores a nivel mundial. De esta forma pudieron entender de primera mano los esfuerzos que la academia está impulsando. Todos han dicho presente: desde compañías de tecnología, hasta farmacéuticas y desde el Departamento de Educación hasta la mayoría de las universidades.
A modo de seguimiento, estamos creando un grupo de trabajo que sea el que coordine estos esfuerzos y mueva hacia adelante las recomendaciones que se van identificando. Aunque estamos comenzando, ya hemos visto algunos resultados positivos, con el gran esfuerzo del rector de la Universidad de Puerto Rico de Carolina proponiendo un currículo en Ingeniería Mecatrónica, que se alinea considerablemente a lo que la industria de manufactura ha reclamado; el apoyo del secretario de educación, Eliezer Ramos; y la colaboración del secretario de educación federal, Miguel Cardona. Esperamos que este sea el inicio de muchos cambios que nos permitan desarrollar un sector educativo ajustado a la realidad de la industria, no solo a nivel de Puerto Rico, pero a nivel global.
Estos dos temas que trabajamos son parte de un modelo de competitividad que rige nuestro enfoque y este viaje a Europa fue una confirmación de que estamos enfocados en lo correcto, pero también fue una señal de que debemos tener prisa y como dicen por ahí, correr asustados, porque el mundo avanza a pasos agigantados y nosotros no podemos quedarnos atrás. Además, me confirma que ahora más que nunca debemos tener nuestra mirada en el mundo entero y mantener oído en tierra, porque solo así podremos anticiparnos y reaccionar rápido en los temas medulares que nos permitirán convertirnos en la jurisdicción competitiva que todos aspiramos.